En entrevista, el Licenciado y Doctor en Ciencias Matemáticas, y actual Profesor Asociado y Director del Departamento de Matemática, e Investigador Principal del CONICET, nos permite conocer algo de su amor en su entrega a su quehacer.
Vale expresar, continuando con su presentación, que para Causa Psicoanalítica en Gral. Roca, es uno de los matemáticos que nos ha sabido sacar de más de un apuro, cuando Lacan nos habla en matemática y topología.
Respecto a la conexión que logró entre la matemática y el psicoanálisis entre otras cosas, nos expresa: “… se trata de constituir un espacio en donde puedo hablar de cuestiones de matemática, dialogar con aspectos de la filosofía, de la lingüística. Por supuesto, como espacio de charla, de conversación, es ideal para mí, ya que en el psicoanálisis confluyen muchas de las cosas de las que a mí me gusta conversar. …”.
Causa Psicoanalítica en Gral. Roca: Buenas noches Pablo, gracias por tu amabilidad en permitirnos realizar la entrevista. La misma es un espacio más que ofrece nuestra Asociación, al que llamamos “Entrevistamos a…”.
Hemos retomado la importancia para los analistas de la transmisión, formación, y lazo, y estas entrevistas, en formato de tres preguntas (siempre las mismas) recrean la propuesta.
En esta oportunidad, comenzaremos por preguntar ¿qué es la matemática para vos?
Pablo Amster: la matemática es en primera instancia un lenguaje; se ha dicho alguna vez que es un lenguaje bien hecho. Justamente en ese sentido es diferente de otras actividades, otras disciplinas como pueden ser las ciencias: las ciencias empíricas, por supuesto, pero la ciencia en general. De alguna manera, la matemática está muy emparentada con la creación artística, porque lo que uno hace en matemática no es estudiar un universo dado de antemano, sino que de cierto modo crea sus propios universos, crea su propio objeto de estudio. ¿Por qué yo me decidí a ser matemático?
Esto quizás es algo difícil de explicar en general porque, de hecho, cuando uno se pone a estudiar matemática no sabe bien de qué se trata y cómo va a ser la actividad del matemático. Pero, a grandes rasgos, puedo decir que cuando estaba en la escuela me gustaban muchas cosas: me gustaba particularmente la literatura, me dedicaba bastante a la música, me gustaba muy especialmente la filosofía… esas eran mis líneas y de pronto, sorpresivamente me puse a estudiar matemática. Digo “sorpresivamente” porque la gente que me conocía me preguntaba ¿qué te pasó?, ¿cómo es que a vos te gustaban tantas cosas lindas y te pones a estudiar matemática? El común de la gente no le tiene mucho cariño a la matemática, pero para mí, al menos visto ahora después de unos cuantos años, es una decisión coherente justamente con todo eso que me gustaba. La matemática como dije al principio, es un lenguaje y es un lenguaje de enorme potencia creativa y expresiva. Creo que es la manera que yo encontré de conjugar todos esos elementos.
C. Ps. en Gral. R.: Pablo, ahora si, y ¿qué es el Psicoanálisis para vos?
P.A.: Desde un punto de vista muy personal puedo decir que el psicoanálisis, para mí, es un espacio de interlocución, más allá de lo que es el psicoanálisis como práctica, de la cuestión que hace a la clínica, y más allá también, en realidad, de las objeciones o de las críticas que se suelen hacer desde las ciencias duras al psicoanálisis. Para mí, en realidad, lo interesante pasa por otro lado: se trata de constituir un espacio en donde puedo hablar de cuestiones de matemática, dialogar con aspectos de la filosofía, de la lingüística. Por supuesto, como espacio de charla, de conversación, es ideal para mí, ya que en el psicoanálisis confluyen muchas de las cosas de las que a mí me gusta conversar. Como matemático, siempre me gustó hacer una especie de acompañamiento a la lectura, particularmente de Lacan, que es algo que tan entretenido tiene a tantos psicoanalistas. Mi idea es, ya que Lacan toca tantos aspectos de la matemática, en lugar de discutir, de criticar o incluso ridiculizar como hace Sokal, o como hace mucha gente dentro del ámbito de las ciencias duras, es decir: no me voy a poner en esa postura sino simplemente explicar esos conceptos matemáticos; como dije, acompañar la lectura. La intención de fondo es que si el lector de Lacan tiene que verse en dificultades, que no sea a causa de la matemática. Por supuesto que después, una vez allanado el camino de ese terreno
matemático, los psicoanalistas tendrán que vérselas con un montón de otras cuestiones y discutir. Pero lo importante para mí es que los conceptos matemáticos que se usan puedan al menos ser comprendidos desde la matemática. A veces hay que hacer un gran esfuerzo de traducción, o de tratar de entender qué es lo que Lacan quiso decir, cuando hizo uso de algún termino matemático. Pero lo que debe entenderse es que no se trata de una aplicación de la matemática como se hace por ejemplo en la física, cuando uno construye un modelo matemático para explicar algún fenómeno. El psicoanálisis no hace ese uso de la matemática; después es eso, todo lo demás es una larga discusión posible: si Lacan la utilizó como metáfora o no, etc. Pero mi rol en esta interlocución consiste en explicar los conceptos para que, en lo posible, no se diga cualquier cosa.
C. Ps. en Gral. R.: Pablo, y ¿por qué la música?
P.A.: Me dediqué a la música desde chico, por muchos años estudié guitarra, estudié teoría musical y, en algún momento, me dediqué profesionalmente a la música. Suelo decir siempre en chiste que me dedicaba a la música hasta que, a pedido del público, me dediqué a la matemática. Cosa que de alguna manera es así. Claro, cuando ya se puso seria mi relación con la matemática, cuando hice un doctorado y ya me empecé a dedicar a la investigación, no pude sostener las dos carreras juntas. Pero de todas formas hay una línea coherente ahí. Como dije al principio, para mí estudiar música y estudiar matemática no son cosas completamente disjuntas; hay una relación muy profunda entre una y otra. Hay una frase muy linda de Borges, que escribió justamente hablando de la matemática. Dijo: “como la música, las matemáticas prescinden del universo, cuyo ámbito comprenden y cuyas secretas leyes exploran”. En ese sentido hay una conexión más profunda entre la matemática y la música, que, entre la matemática y otras artes, por ese nivel de abstracción que maneja la música. Leibniz dijo que la música es un ejercicio de aritmética inconsciente; de paso metemos ahí un término que tiene que ver con el psicoanálisis: de hecho, Leibniz fue el que hablo del inconsciente quizás por primera vez.
Como dije al principio, hay una conexión entre todas las cosas que me gustan y ese
lenguaje, de alguna forma ordenador de todo esto, que es la matemática.
C. Ps. en Gral. R.: Muchas gracias, Pablo.
P. A.: Por supuesto. Hay muchísimo más para decir sobre estos temas, así que estamos en contacto. Muchas gracias.
Septiembre, 2017.